Durante un año, dichos artículos, entre ellos el aceite, frijoles, harina y tomates estarán exentos del impuesto a la importación para abaratar el costo que el consumidor final paga por ellos.
En sesión plenaria extraordinaria número dos, con 74 votos, los diputados aprobaron la Ley Especial Transitoria para el Combate de la Inflación de Precios de Productos Básicos, enviada por el Presidente de la República, Nayib Bukele, como parte de las 11 medidas para hacer frente a la inflación mundial.
Los productos exentos de impuesto sobre la importación son los aceites y mantecas, arroz, azúcar, cebollas, chiles, fertilizantes, frijol negro, frijol rojo, harina de maíz, harina de trigo, leche fluida, maíz amarillo, maíz blanco, naranjas, papas, plátanos, repollo, tomates, trigo en cereal y alimentos para animales.
“Estamos beneficiando a la gente en dos sentidos, en primer lugar, a los productores, porque necesitamos fortalecer la producción agrícola en el país, y en segundo lugar se está eliminando aranceles a productos de consumo humano”, dijo el diputado Saúl Mancía.
El diputado y presidente de la Comisión Agropecuaria, Ricardo Rivas, explicó que la ley beneficiará a la población en general y, particularmente, al 60% de esta, que se concentra en zonas rurales, principalmente a los ganaderos y avicultores.
“Más de 80,000 ganaderos van a ser beneficiados porque no van a pagar el DAI (Derechos Arancelarios a la Importación) en las materias primas para la fabricación de concentrado del ganado. También el sector avícola, que genera más de 80 mil empleos, será favorecido”, afirmó el legislador.
Por otra parte, la medida permitirá que los importadores tengan más opciones de países para traer productos, con el requisito de que su estatus sanitario sea igual o superior que el del El Salvador.
La ley establece que para su aplicación no se requerirá de la presentación de permisos previos a la importación, emitidos por las autoridades nacionales competentes.
En el ingreso de productos al país solo se deberá presentar la documentación aduanera requerida para el régimen de importación definitiva, información relacionada con la inocuidad y calidad de los productos.
También deberá entregarse una declaración jurada ante la autoridad aduanera en la que se consigne que el producto cumple con los requisitos de inocuidad y calidad que establece la legislación salvadoreña.
Entre otros datos se deberá presentar información en la que se indique el lugar de almacenamiento y destino de los productos, para que las autoridades competentes puedan realizar una trazabilidad de los mismos y hacer vigilancia sanitaria y fiscalización de mercado.
La Defensoría del Consumidor en coordinación con la Superintendencia de Competencia mantendrán una vigilancia en el mercado para garantizar que los consumidores perciban un ahorro en sus compras gracias a estas medidas. A esta labor se sumarán equipos del Ministerio de Agricultura y Ganadería.
Los alimentos y fertilizantes gozarán de la exención de pagos arancelarios durante un año, para traer un ahorro significativo al bolsillo de los salvadoreños en medio de la crisis inflacionaria mundial.