Los recursos que se obtendrán con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento permitirán a las autoridades comprar medicamentos, insumos y equipo médico.
El Gobierno salvadoreño continúa resguardando la salud de la población con el apoyo de la Asamblea Legislativa. En la sesión plenaria fue aprobado, con 65 votos, un contrato de préstamo con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF).
El acuerdo entre el banco y el Ejecutivo, a través del Ministerio de Hacienda, fue suscrito el 6 de julio pasado, por un monto de hasta $100 millones. Este fue denominado: “Segundo Financiamiento Adicional para Proyectos de Respuesta de El Salvador ante el COVID-19”.
“(El dinero) es para responder y mitigar la amenaza que representa el COVID- 19 y fortalecer el sistema nacional de salud. Este monto va a servir para la detección del virus, a través de las pruebas PCR y con ello saber las estadísticas referente a esta enfermedad”, apuntó el diputado de Nuevas Ideas, Luis Figueroa.
Este segundo financiamiento apoya la adquisición de medicamentos, insumos y equipos médicos, obras de rehabilitación y oxigenadores. En abril de 2021 se aprobó un financiamiento adicional de $50 millones para el Proyecto que permitió, entre otros aspectos, la adquisición de 1,2 millones de dosis de vacunas para inmunizar al 11 % de la población.
“Estos fondos nos van a ayudar para tener recursos para comprar insumos hospitalarios y seguir obteniendo las vacunas para salvaguardar la vida de la población”, explicó el legislador Amílcar Ayala, del grupo parlamentario de la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA).
Un informe del BIRF registra que el Gobierno salvadoreño puso la meta de vacunar con esquema completo a 5,9 millones de personas (aproximadamente el 90% de la población), incluyendo niños mayores de seis años. También se han autorizado y administrado vacunas de refuerzo a poblaciones elegibles.
Además, realizó inversiones para la instalación de 362 centros de vacunación, incluyendo la construcción de un megacentro de vacunación y la remodelación de centros de salud.
Las inversiones incluyeron el fortalecimiento de su capacidad de cadena de frío, el despliegue de una estrategia de vacunación puerta a puerta, la capacitación del personal de salud a nivel nacional y la habilitación de sistemas de tecnología de la información para el registro, programación, seguimiento y análisis de vacunas.
“Los esfuerzos que como Gobierno se están haciendo deben de continuar, porque esta enfermedad vino para quedarse. Este país es uno de los mejores evaluados referente al manejo de la pandemia”, indicó el parlamentario Jonathan Hernández, también de la bancada cyan.